Hollywood le hizo justicia a Guillermo del Toro: el famoso Paseo que se encuentra en el centro de la Ciudad de Los Angeles, ya tiene un nombre más sobre su piso, el del cineasta mexicano que será eternizado por muchos años y que obviamente será un motivo más para la foto del recuerdo de los miles de turistas que acuden a este conocido Boulevard.
Y como buen mexicano, el famoso gordo sacó la bandera tricolor en el momento en que decenas de fotógrafos y gente que se dio cita en el lugar, tomaron las fotos del recuerdo. Guillermo sonreía y gritaba con orgullo ser mexicano y más ahora que todavía está fresca en la memoria la tragedia de El Paso, Texas, en donde ocho compatriotas perdieron la vida.
Como es costumbre de todos los que develan su estrella, Guillermo del Toro se agachó para correr la cortinilla roja, dejar al descubierto su placa y recibir el aplauso de la concurrencia, entre la que se encontraba nada menos que la cantante Lana del Rey, los actores Ted Dawson Elliott Gould y Ron Perlman, así como el productor J.J. Abrams.
El cineasta mexicano aprovechó la oportunidad para mandar un mensaje positivo sobre el papel de los migrantes en Estados Unidos; pidió que no se le haga caso a los discursos de odio hacia la gente que sólo busca un horizonte de progreso en esa nación.
“Deben de creer en las posibilidades y no en los obstáculos. Nunca crean las mentiras que dicen de nosotros, crean en las historias que no han visto y crean que todos podemos hacer historias y contribuir al arte y al mundo”, fue uno de los tantos mensajes que expresó Guillermo del Toro durante su intervención.
FOTO: NOTICIEROS TELEVISA
