“Mi tía me dijo que la Diosa de Plata me bautizó porque al ganarla fue el inició de una serie de éxitos para “La soledad” tanto en México como en otros países”, comentó María Conchita Díaz, cuyo cortometraje obtuvo el llamado BAFTA estudiantil que la convierte en la primera cineasta mexicana en obtenerlo.
Aunque es un galardón otorgado por la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de Televisión, cuya sede es Londres, Inglaterra, por cuestiones de logística la premiación se realiza anualmente en Los Ángeles, California, ciudad a la cual acudió Conchita al estar nominada por su trabajo fílmico.
“Llegamos unos días antes para ver todos los materiales cinematográficos nominados y convivir con el resto de los directores postulados en las diferentes categorías. Me tocó competir con cortometrajes hechos en Nueva York y Alemania y la verdad pensé que no podría ganarles, pero afortunadamente México se llevó el premio”, comentó emocionada Conchita.
Señaló que el primer galardón que obtuvo “La soledad” fue la Diosa de Plata y a partir de ese momento su cortometraje ha obtenido más premios en México y otros países, lo que habla de la buena mano que el galardón que entrega Periodistas Cinematográficos de México les trae a quienes lo ganan.
En otro orden de ideas, Conchita recién terminó la filmación de un nuevo largometraje titulado “Ascio o día sin sombra”, realizado en el poblado Santo Domingo Barrio Bajo Etla, Oaxaca, pueblo de su familia paterna, bajo el contexto de una mayordomía insertando una historia de ficción protagonizada por la actriz oaxaqueña Renata Cristo.
“Este rodaje lo hicimos con nuestros propios recursos económicos y un crew de siete personas incluyendo a la actriz y lo hice porque son muchos mis deseos de hacer largometrajes. Creo que tenemos excelentes imágenes y aunque no tuvimos un guion, el hacerlo sobre la marcha fue todo un reto y espero que al final tengamos un trabajo fílmico interesante para los espectadores”, comentó la realizadora.