En una sala de la Cineteca Nacional de las Artes, se rindió homenaje póstumo a los directores de películas Carlos Enrique Taboada, el genio mexicano del cine de terror y de suspenso, a José “Perro” Estrada y a Gonzalo Martínez, quienes se distinguieron, éstos dos últimos, por su compromiso con el cine de calidad y la defensa de la labor profesional de los autores y guionistas, campo en el que ambos desarrollaron una importante tarea.
De esta manera, se iniciaron las actividades correspondientes a las celebraciones del 78 aniversario del STPC, de la Sección de Técnicos y Manuales (STyM) y de los estudios Churubusco, las cuales se llevarán a cabo durante 10 días en el mencionado complejo cinematográfico y comprenden conferencias, proyección de cortometrajes y de películas, la primera de ellas, “El rebozo de Soledad”, totalmente digitalizada, se proyectó el primer día de festejos.
Antes, hubo una ceremonia en la que el secretario general del STPC y del STyM, Felipe Marino, y el cineasta Oscar Blancarte, Secretario General de la Sección de Directores, entregaron a la viuda de Carlos Enrique Taboada, María del Rocío Amézquita y a la de Gonzalo Martínez, María Luisa Arcaraz, y a su hija, Luisa Martínez, los respectivos reconocimientos.
Luis Estrada, director de las películas “El infierno” y “La dictadura perfecta”, entre otras, no pudo asistir a recoger el de su padre, José “Perro” Estrada, el cual lo recogió en su nombre, el cineasta, Sergio Olhovich.
En la misma ceremonia, el dirigente del STPC y del STyM, Felipe Marino, también recordó a tres distinguidos miembros de su gremio quienes con su labor contribuyeron a que la cinematografía mexicana tuviera una etapa de esplendor con la llamada época de oro.
“En la entrega de los grandes premios, los Oscar o los Arieles, siempre es difícil que se reconozca el trabajo de los técnicos y de los trabajadores. A veces nos dejamos llevar sólo por los nombres y no nos damos cuenta que hay mucha calidad en otros integrantes de nuestro sindicato.
“Para mí es un honor rendir este homenaje póstumo a tres extraordinarios compañeros, Javier Méndez Ramírez, un talentoso trabajador de construcción, con una enorme capacidad creativa, sólo para que se den idea de su labor, él participó en la construcción de los sets para la película ‘Titanic’.
“Y ni qué decir del fotógrafo, Rosalío Solano, uno de los más extraordinarios directores de fotografía no sólo de México sino del mundo. También hoy recordamos con este homenaje póstumo a un brillante sonidista de películas a nivel mundial, el ingeniero José B. Carles”.
Acto seguido a Ana Revueltas le fue entregado el reconocimiento de Javier Méndez y a Victoria Carles, nieta del ingeniero José B. Carles, el correspondiente a su abuelo. Del fotógrafo Rosalío Solano no pudieron asistir sus familiares por lo que Felipe Marino dijo que se les hará llegar a su domicilio.