Una reflexión profunda sobre las pérdidas y la intimidad del duelo a partir de la muerte es la que nos comparte el director José Medina en “Día de Muertos”, su ópera prima que se exhibe desde el 25 de octubre en el circuito de salas independientes de México.
En su película, un drama de 100 minutos, Medina, quién está detrás de trabajos cinematográficos como “El canto del Zenzontle”, “María” y “Caos el trastorno de mente”, se aproxima a la celebración del “Día de Muertos” pero no para sumarse a ella sino para retratar la realidad de una sociedad donde se evade el dolor y la impotencia que dejan aquellos que mueren a diario en nuestro país.
El planteamiento de su narrativa surge a partir de la historia de ‘Camila’ (Gabriela Mintiel) quien después de la pérdida de sus padres y del bebé que estaba esperando a causa en un sismo, continúa el duelo, acompañada por su prima. Y mientras las tradiciones nacionales adornan coloridas y festivas las calles para celebrar a la muerte, ‘Camila’ entiende que la sociedad no hace justicia a la impotencia y al dolor que siente por la ausencia de su familia.
En estas circunstancias se aísla del mundo tratando de superar este duelo, pero no puede dejar de preguntarse qué pasa después de la muerte, la gloriosa muerte, venerada y sufrida, recordada y temida, glorificada por el destino al no tener otro puerto seguro.
El personaje parece estar ajeno al mundo que la rodea y no comprende la insensibilidad de otras personas ante su situación, por lo que busca respuestas en cualquier cosa que pueda brindarle un poco de consuelo, pues la muerte de sus padres también significa un replanteamiento de sus planes de vida. Durante la víspera de todos los santos, su prima debe viajar para conseguir trabajo lo cual vulnera aún más a ‘Camila’.
Poco a poco, la protagonista comienza a sentirse sola y a tener un gran temor a morir y aunque intenta sobreponerse a sus miedos, parece que sus dudas la consumen, finalmente su prima regresa, pero ‘Camila’ se encuentra en un estado frágil y el cuidado será una de las claves para su sanación.
Apoyada por AREWÁ Producciones, “Día de Muertos” llega a la pantalla grande después de los eventos a los que la sociedad mexicana se ha enfrentado en los últimos años, como el sismo del 19 de septiembre del 2017 y la pandemia por el virus del SARS-CoV-2, en los que miles de familias sufrieron pérdidas importantes tanto de seres queridos como de hogares o trabajos.
“A veces, la soledad puede ser perjudicial, genera pensamientos y emociones complejas, como sucede con ‘Camila’. Ella pasa por un proceso de duelo y la celebración de esta festividad le resulta abrumadora…
“En ‘Día de muertos’ nos deshacemos de los colores, la alegría y la parte festiva para llevar el proceso de la protagonista a un plano íntimo. Quisimos hacer un acercamiento empático al duelo, para entender cómo podemos sobreponernos al dolor y cómo la ausencia también puede volverse un lugar cálido en dónde reconstruir lo que somos”, afirma José Medina, también autor del guión y productor del filme junto con Aydee Domínguez.
El “Día de Muertos” es una celebración muy arraigada a nuestra cultura, “pero en otros lugares no es tan comprensible” -mencionó el cineasta egresado de la Universidad del Cine en 2011, y argumentó que en lo personal concibe la celebración como “el acto de no querer aceptar que nuestros seres queridos se han ido, como si pudiéramos negar su ausencia y esperar a que regresen…
“Quería plantear no tanto el sufrimiento que una persona experimenta al perder a un familiar, sino la idea de que en realidad no es una celebración tan festiva para quienes han vivido la pérdida de alguien cercano, una realidad que debe llevarnos a reflexionar sobre qué hay después de la muerte y el proceso de duelo necesario para atravesar el dolor”.
El reparto de “Día de Muertos”, lo integran Gabriela Montiel, Ishbel Bautista, José Sefami, Antonio Monroi, Clementina Guadarrama, Quetzalli Cortés, Patricia Rojas, Ignacio Guadalupe e Isi Rojano.