Este 18 de mayo se estrenó en las salas comerciales de México “Verde, Azul o Café”, ópera prima de Erick Blackmer que ostenta el mérito de ser la película realizada con el menor presupuesto en la historia del cine mexicano.
Solo treinta mil pesos fueron invertidos en esta cinta jalisciense, una arriesgada producción independiente que posterior a su corrida comercial en las principales ciudades de la República y tras haberse presentado en Festivales como el de Estocolmo, San Petersburgo y en “La Gran Fiesta del Cine Mexicano”, llegará a la audiencia internacional vía plataformas.
Distribuida por Homosapiens Films en alianza con Cimemagic Distribución, “Verde, Azul o Café” cuenta con las actuaciones estelares de Frank Rodríguez, Liz Sandoval, Marimer Espinoza y el debutante José Luis Medrano, quienes en la historia dan vida a Ulises, Victoria, Ivana y Raúl, cuatro amigos reunidos en una fiesta donde entre cervezas, drogas, negocios y tensiones, ocurre el misterioso asesinato de uno de ellos.
“La nuestra es una historia ‘guerrillera’ de humor negro que desarrollamos durante la pandemia en tan solo 17 días, pero con el amor y la pasión de un equipo conformado por ocho personas en el crew, incluyendo al elenco…
“Todos aportaron lo mejor de sí para hacerla posible, desde el argumento y la escaleta, que se construyeron sobre la marcha, en conjunto y con planos largos (secuencias) por la improvisación de los actores”, afirma Erick Blackmer, orgulloso de los resultados logrados con la película hecha de forma cooperativa e independiente, que además de su estreno en salas comerciales de México, ya fue vendida a varios países.
También involucrado en la producción de “Verde, Azul o Café”, junto con Frank Rodríguez (Lylu Films), Liz Sandoval y Marimer Espinoza, Jerzain Ortega (fotógrafo), Abif López Vidaurri, José Luis Medrano y Joaquín Martínez Martínez (coproductor), Blackmer calificó como un logro inesperado el que su ópera prima ya esté exhibiéndose en el cine.
“Para mí es verdaderamente un logro inesperado y lo fue desde el momento en que llegó a Festivales como el de Estocolmo y San Petesburgo y confío en que la película, cuyo título alude a las características de los propios personajes involucrados en la historia, será bien recibida por el público, ya que la obra está hecha para entretenerlo.
Frank Rodríguez, quien en la trama interpreta a “Ulises”, personaje que trabaja en una empresa aduanal, donde es tentado por su amigo “Raúl” a robarse mercancía valiosa para revenderla en el mercado negro, asumiendo los riesgos que esto puede ocasionar, mencionó que el mérito principal de “Verde, azul o café”, radica en que es una película que apuesta por un tipo de cine distinto”.
“México es un mercado saturado de comedias románticas o filmes de cine de autor donde pocas veces se arriesga por guiones de géneros distintos, como el nuestro”, aseguró el actor, director y productor, quien durante la pandemia, filmó en distintos escenarios de México, la cinta “Tratado”, al lado de Salvador Zerboni.
Tras referir que “Verde, Azul o Café” fue filmada en un 80% al interior de una casa en el fraccionamiento Senderos de Monte Verde al sur de la ciudad de Guadalajara y en el cerro del Tesoro, Frank destacó que la película, en la que Liz Sandoval encarna a “Victoria”, una chica ha sufrido la ausencia de sus padres, situación que la lleva a las adicciones, representa un esfuerzo por continuar produciendo en Jalisco cine independiente de calidad.
En cuanto a la concepción de “Verde, Azul o Café”, Frank Rodríguez, quien como director cuenta con antecedentes en las cintas “Inevitable” y “Las reglas de la ruina”, entre otras, mencionó que surgió en plena pandemia: “Un día nos juntamos Liz Sandoval y Marimer Espinoza en un barecito para platicar de cine. A esa plática se sumó después Jerzain Ortega (cinefotógrafo), y de pronto surgió la historia…
“Todo fue como de compas. Invitamos a Erick y a los demás amigos que participan y una vez decididos, entre todos juntamos los treinta mil pesos que más bien destinamos a la postproducción. Y fue como de compas, cada quien puso su sueldo, sus ganas y su tiempo. La edición y corrección de color yo me la aventé y del sonido, se encargó en sus ratos libres un amigo que tenemos en Ucrania”, contó.
“Parecía casi imposible que pudiéramos concretar este sueño porque el nuestro es un cine independiente, de guerrilla, pero el poco presupuesto no nos impidió realizar un cine totalmente profesional con base en una escaleta que se fue ajustando sobre la marcha. Grabamos en el día y por la noche regresaba Erick a su casa para checar el material, montarlo y hacer los ajustes…
“Fue complejo porque había que empatar las historias entre ellos, además de que tener un crew tan reducido es una locura, como nos ha manifestado mucha gente, incluidos los exhibidores”, remarcó Frank.
En la plática con Pecime, Frank Rodríguez agradeció a la agrupación de Periodistas Cinematográficos de México, por haber considerado este año por primera ocasión al cine independiente de Jalisco para evaluarlo, nominarlo y premiarlo, como ocurrió en la edición numero 48 de la entrega de las Diosas de Plata celebrada el pasado 25 de abril en el teatro 2 del Centro Cultural en la Ciudad de México.
“Para nosotros fue histórico y estamos emocionados y muy agradecidos con Pecime porque al ver nuestras películas, nominarlas y premiarlas, como ocurrió con “El Poderoso Victoria” y “No vayas a clase mañana” se nos abre un panorama mucho más amplio. Este apoyo nos ayuda y lo valoramos muchísimo”, expresó para concluir.