El cineasta, Juan Antonio de la Riva, fue reelecto por un periodo más como presidente del Consejo Directivo de la Sociedad de Directores de Cine. Los buenos resultados que su administración ha obtenido, a pesar de haberse paralizado las actividades por la pandemia del Covid 19, fueron determinantes para que los socios le ratificaran su confianza para que siga al frente del organismo autoral y, con ello, una vez normalizadas las actividades en el país, concrete los proyectos que se quedaron pendientes por el confinamiento al que estuvo sometida la población.
El nuevo Consejo Directivo que estará al frente de la agrupación quedó conformado de la siguiente manera: Juan Antonio de la Riva, Presidente; Gilberto de Anda, Secretario Vocal; José Antonio Medina, Secretario de Actas mientras que los vocales serán: Miguel Marte, Busi Cortés y Leopoldo Laborde.
El Comité de Vigilancia estará presidido por Rafael Villaseñor, quien repite en el cargo, y con él fueron electos Sergio Olhovich y Francisco Guerrero. Por primera vez, la Sociedad dio apertura a la participación en el consejo a herederos de auténticas glorias del cine nacional, directores que forjaron y dieron prestigio mundial a la cinematografía mexicana.
En tal sentido Rodolfo de Anda, hijo del famoso cineasta que fue conocido como «El Charro Negro», se incorporará al Consejo como vocal, en tanto que en la asamblea también estuvieron presentes herederos de los derechos de otros prestigiados directores, como son los casos de la viuda de Felipe Cazals, Rosa Eugenia Báez, Meritxell Gález, viuda de Gabriel Retes; María Alba Pastor, hermana y heredera de los derechos del finado cineasta Julián Pastor; Julima Cardona; heredera de los derechos de su abuelo, su padre y su hermano, René Cardona señor, René Cardona II y René Cardona III.
Visiblemente emocionado por la confianza que sus compañeros directores le otorgaron al elegirlo para un periodo más al frente de la Sociedad de Directores, Juan Antonio de la Riva bromeó con la frase que utilizan muchos políticos: «No les voy a fallar, ahora sí les voy a cumplir».
Ya en tono serio dijo estar muy satisfecho porque a pesar de las actividades se paralizaron prácticamente dos años por la pandemia del Covid 19, la Sociedad no dejó de cobrar y de pagar a sus socios sus regalías y que inclusive éstas aumentaron.
«En la asamblea de abril, informé a los socios que a pesar de las adversidades tuvimos números negros y que las negociaciones que iniciamos con las diferentes plataformas digitales y otros sistemas de difusión de las películas de nuestros representados, mismas que se quedaron pendientes por el problema del confinamiento, vamos a reiniciarlas y ahora con el propósito de llegar a acuerdos que nos permitan cobrar los derechos que se generan por la transmisión de sus obras.
«Estoy seguro que vienen buenos tiempos para la sociedad y para sus integrantes porque el catálogo de películas mexicanas es uno de los más ricos, variados y extensos del mundo y seguramente que hay muchos usuarios que querrán ofrecerlo a sus públicos y eso se traducirá en mayores percepciones para los miembros de la Sociedad de Directores», comentó finalmente.