Del Puño y Letra de Jaime Fernández
-Fue hermano de “El indio” de quien se distanció más de 20 años
-Como líder de la ANDA provocó la salida de más de mil artistas
El actor Jaime Fernández fue medio hermano del laureado cineasta Emilio “El indio” Fernández, quien lo apoyó cuando empezaba su carrera dándole pequeños papeles en varias de sus películas, y le dio su primer coestelar en la película “Las islas Marías”, al lado de Pedro Infante, pero la dureza y rispidez con que lo trataba hizo que entre ellos surgieran fuertes diferencias y se distanciaran por más de 20 años.
A pesar de eso, a la muerte de “El Indio”, Jaime reconoció que le debía mucho a su hermano porque lo había enseñado a actuar, gracias a lo cual logró realizar una brillante carrera en el cine, en el que participó en más de 180 películas además de lograr destacar también en la televisión, en series y telenovelas de éxito como “Los hermanos coraje”.
La vida artística de Jaime Fernández estuvo marcada por los claroscuros. Como actor ganó premios importantes, entre ellos la Diosa de Plata de PECIME, por su participación en la película “Tarahumara”, pero como líder de la ANDA, su afán de permanecer en el cargo más tiempo de lo debido, propició, en la década de los 70s, una desbandada de más de mil artistas, que crearon el Sindicato de Actores Independientes, encabezados por Enrique Lizalde.
Con él se fueron al SAI actores y actrices de renombre, entre ellos: Claudio Obregón, Pancho Córdova, Claudio Brook, Fernando Luján, Jacqueline Andere, María Rojo y Ofelia Medina, entre otras figuras, pero como eran los tiempos en que en el país dominaba el PRI, dicho sindicato jamás fue reconocido por las autoridades.
Jaime se inició en el medio artístico como técnico de efectos sonoros en las estaciones de radio XEQ y XEW. Su primera incursión en el cine fue como extra en la segunda versión de “Allá en el rancho grande”, película dirigida por Fernando de Fuentes, en 1948.
Su hermano, Emilio “El indio” Fernández, para apoyar su carrera, empezó a darle pequeñas participaciones en sus películas hasta que, convencido de sus avances como actor, le dio su primera gran oportunidad al hacerlo debutar como coestelar nada menos que con Pedro Infante en el filme “Las islas María”, lo que lo puso en la óptica de otros directores de cine.
Por sus marcados rasgos indígenas, Roberto Gavaldón lo incorporó en su película “El rebozo de Soledad” (1952), y ese mismo año Luis Buñuel le dio el personaje de “Viernes”, en el filme “Robinson Crusoe”. Ambas historias dieron proyección a Jaime cuya labor actoral se afianzó cuando participó en “La rebelión de los colgados”, en la que nuevamente fue dirigido por Emilio Fernández y en la que es considerada una de las mejores películas de “El indio”.
Tras esta producción, Jaime y su hermano Emilio se distanciaron después de tener fuertes discusiones casi al a punto de llegar a los golpes. A partir de ese momento cada quien siguió su camino y Jaime empezó a participar en coproducciones internacionales que México realizaba con otros países, entre ellas: “Los orgullosos” (1953), La carga de los rurales” (1955), “Yo soy la revolución” (1960) y “Los cañones de San Sebastián” (1967).
Más allá del error de querer permanecer más tiempo del debido al frente de la ANDA (estuvo 12 años), lo que provocó la división de gremio actoral y que más de mil miembros de ese organismo se fueran a crear el SAI (Sindicato de Actores Independientes), Jaime Fernández fue un actor que realizó una importante trayectoria en los escenarios, en los que dejó constancia de su talento y capacidad histriónica.
Hoy lo recordamos en ese espacio con el texto que dedicó a PECIME el cual les compartimos: