Tras obtener en días recientes una mención especial en el Festival Internacional de Cine Infantil «Ojo al Piojo!», en Argentina, la cinta mexicana «Corazón de mezquite», filmada y actuada por miembros del pueblo Mayo, ubicado entre Sinaloa y Sonora, llegará a las salas el próximo 9 de septiembre.
Protagonizada por Mairyn Buitimea, una niña que fue seleccionada entre decenas de jóvenes de la comunidad Yoreme, la cinta estrenada hace un año en el FICG, después de ser reconocida con el Grand Prix de Montréal Award en Canada, sigue la historia de ‘Lucía’, una pequeña cuyo máximo deseo es tocar el arpa como su papá ‘Fidel’ (Ianis Guerrero), actividad que dentro del pueblo sólo realizan los hombres.
La trama de este film de la directora Ana Laura Calderón («La Isla de la Juventud», «Las horas muertas» y «Dibujando el Cielo»), en el que intervienen miembros de la propia comunidad, como Mairyn, Julio Valenzuela y Camilo Yocupicio, quienes además prestaron sus hogares como locaciones para la película, retrata tradiciones como las fiestas patronales de la localidad y la lengua yoreme.
Ianis Guerrero fue el único actor profesional en el rodaje, por lo que tuvo que integrarse a la comunidad del Mayo, para conocer su estilo de vida y su lengua (Yoremnokki), además de empaparse en lo básico de sus tradiciones y aprender a tocar el arpa, pues su personaje es un músico guardián de las costumbres de su entorno.
Ante los deseos de su pequeña hija por también ser arpista, ‘Fidel’ enfrenta una deconstrucción de sus ideales arraigados que impiden que una mujer se vincule directamente con ese instrumento: «Hay todo un conflicto entre este padre y su hija, a la que ama, pero no entiende cómo es que ella quiere ser moderna y tocar el arpa», ha comentado Ianis.
Filmada en cinco semanas en La Bocana, El Júpare, Las Flores y Huatabampo, Sonora, bajo la producción de Milko Luis Coronel, la película contó con el apoyo del estímulo fiscal de Eficine y fue realizada con un presupuesto de 10.5 millones de pesos. Una buena parte de los recursos se invirtió en la propia comunidad, para pagar honorarios a todos los que participaron, así como comidas y hospedaje para un crew de 30 personas.
También realizadora de «Always On My Mind» (2013) , Ana Laura Calderón expresó que el filme surgió cuando conoció junto a la guionista de la película Ana Paula Pintado, a las sobrinas-nietas de ‘Candelaria’, una arpera que vivió en Pueblo Viejo, Sonora, durante la época de la Revolución Mexicana. «Ellas leían las cartas, eran medio brujas, igual que ‘Candelaria, según su relato»‘
«Después de escucharlas hablar de ‘Candelaria’, le sugerí a Ana Paula que hiciéramos una película de eso, pero sin representar a una bruja sacada de la sociedad, sino diferente, y estuvimos de acuerdo en que la protagonista de la historia fuera una niña, pero realmente ‘Candelaria’ está en la película, sin ser ella el centro del argumento».
Antes de su llegada al Festival Internacional de Cine de Gudalajara el año pasado, el filme había sido exhibido en más de una decena de festivales alrededor del mundo, y reconocido con seis premios internacionales, dos de ellos en el Woman Film Fest de San Diego; uno más en Glasgow, Houston, y los otros en Alemania y Panamá.