“El cine debe ser parte de la reflexión sobre los estereotipos”: Tenoch Huerta

De origen purépecha y nahua, por el lado de sus abuelos paternos, el actor Tenoch Huerta se sumó recientemente al debate generado sobre el racismo y opinó que es necesario que el cine y la comedia mexicana, peculiares por su “picardía”, sean parte de la reflexión sobre los estereotipos.

“Hay que hablar en el cine de estas estructuras que van oprimiendo. Más allá del humor, que sí es importante abordarlo, lo relevante es qué historias construimos alrededor del color de la piel, qué historias construimos alrededor del nivel socioeconómico… 

“Siempre que hablamos de la clase baja, las narrativas siguen siendo de la violencia, de lo grotesco, lo sórdido, lo brutal. Tenemos que abordar toda la narrativa que se construye alrededor del clasismo y el racismo, porque desde ahí construimos la ficción”, afirma el actor de 39 años, quien aprovecha la cuarentena para reflexionar como persona, como actor, como padre y como mexicano.

Reconocido por sus personajes  en producciones de éxito  como la serie “Narcos México” o “Días de Gracia”, Tenoch afirma que esas narrativas están presentes también en la televisión y en la publicidad, porque la realidad es que “hay una intención de blanquear a la sociedad mexicana, cuando más del 70 por ciento de los mexicanos somos de piel morena”.

En relación a la injusticia social, el actor opina que el arte y sus intérpretes tienen que formar parte de la necesaria transformación social aprovechando el altavoz que su reconocimiento les otorga. “Considero que es parte de lo que un artista tiene que ser: tiene que cuestionarse y cuestionar el mundo en el que vive. Si el arte no rompe, destruye e irrumpe de manera incluso estridente no es arte”, sentenció.

Incluso en sus redes sociales y entrevistas, el histrión nominado en cuatro ocasiones a la Diosa de Plata, ha mostrado con claridad su posición frente a este tema, con el convencimiento de que nuestro país  “tiene que abrir los ojos y admitir que el racismo no solo existe, sino que se ha normalizado, e impide injustamente el desarrollo educativo, profesional y social de millones de mexicanos”.

“El racismo es un sistema completo que te niega las posibilidades de desarrollo, que te oprime y te limita”, denunció el actor y aclaró: “No lo digo yo, hay estudios, hay mucha literatura de académicos mexicanos. La piel más oscura representa menor nivel de ingresos y menores oportunidades para ascender en el trabajo».

Constantemente requerido en el cine y en plataformas digitales como Netflix o Amazon Prime Video, para la que tiene en puerta su participación en la serie “Mexica”, protagonizada por el español Javier Bardem y en la que dará vida al emperador Moctezuma Xocoyotzin, Tenoch puso como ejemplo que en pleno siglo XXI, las tiendas departamentales vendan cremas blanqueadoras de rostro.

Asimismo, que los protagonistas de las comedias románticas siempre son caucásicos. “En las conversaciones familiares resuenan los dichos ‘¡no seas indio!’, ‘vas a mejorar la raza’, o ‘¡está prietito, pero bonito!’. En las escuelas, los niños se llaman ‘negro’, ‘prieto’, ‘indio’ o ‘quemado’. Y en las oficinas, se niega el ascenso a una persona por su color de piel”.

Desde que comenzó  su carrera en el mundo de la actuación, Tenoch Huerta, quien creció en las calles de Coacalco en estado de México, ha dado vida a pandilleros (“Nesio”, 2008); prisioneros (“Get the Gringo”,con Mel Gibson, 2012) o  narcotraficantes (“Narcos México, 2018), serie ésta en la que interpretó al capo mexicano Rafael Caro Quintero.

Extraídos de la marginalidad y de mundos sórdidos y violentos, este tipo de personajes  que lo han hecho alcanzar el éxito en su profesión, también –dice el histrión- reflejan el racismo sistemático de la industria del entretenimiento y al  igual que la gran mayoría de mexicanos de piel morena, asegura que él ha vivido situaciones racistas.

Sin embargo, a diferencia de muchos, a él no le da miedo aceptar que a veces también ha estado del otro lado, y ha sido racista, aunque sin pretensión consciente de hacer daño. “Y es que el discurso está tan interiorizado, que es difícil darse cuenta de que lo reforzamos…

“Yo también he hecho comentarios como ‘te bajaron del cerro a tamborazos’ y no con mala intención, pero expresiones como ésta son profundamente racistas. Todos lo hacemos. Yo he sido racista y clasista”.

En este tema, Tenoch recuerda que de niño, “cuando jugaba con mis amiguitos en la calle, salíamos a jugar al campo y si olía feo decíamos ‘huele a indio’, ‘huele a indio’. Entonces, yo creo que el problema no es aceptarnos o asumirnos como racistas o clasistas, sino más bien corregirlo, hacernos responsables de eso y decir, ‘sí, lo he hecho’, y ahora, ¿qué hago para cambiarlo?, creo que eso es lo bonito”.