Bien dice el dicho “cuando hay para carne es vigilia” y esto se lo podemos aplicar a lo sucedido en uno de los cines del complejo ubicado en Plaza Tepeyac, donde sin dar una explicación convincente, se suspendió la función de la película mexicana “Correr para vivir”.
Como es sabido, los productores de cine nacional se quejan de que no haya las salas suficientes para exhibir los filmes realizados por ellos y cuando tienen esa posibilidad se les otorgan salas en complejos cinematográficos con poca afluencia de público y con horarios demasiado temprano o muy tarde.
Ahora que Cinépolis le otorgó a la película “Correr para vivir” una sola exhibición en el horario de las 16:30 horas”, en una de sus salas de Plaza Tepeyac, atrajo la atención de una cantidad aceptable de espectadores, quienes decidieron pasar la tarde disfrutando el filme protagonizado por Martijn Kuiper, Eligio Meléndez y Vladimir Rivera, entre otros.
Una vez terminados los “cortos” y las recomendaciones de apagar el celular y no grabar las películas, se oscureció en su totalidad la sala para dar inició con la cinta, cuando repentinamente la pantalla quedó en negro y se prendieron las luces de la sala.
Los espectadores estaban sorprendidos por lo que había ocurrido y pasaron más de cinco minutos sin saber que pasó ni tampoco que un empleado del cine explicara por qué no se estaba proyectando la cinta. Fue hasta que una persona del público salió de la sala para informarles que no se estaba pasando el filme.
Casi 20 minutos después una jovencita se asomó por la puerta de acceso para indicar que “En breve ya les proyectaremos el filme”, pero eso no ocurrió. Minutos después apareció la encargada de las salas para indicar que se cancelaba “Correr para vivir”, sin explicar el motivo y propuso proyectar “Abigail” o canjear la entrada para el día siguiente, pues como dijimos líneas arriba la película mexicana solamente cuenta con una sola función diaria.
El sistema de proyección en la actualidad denominado DCP es muy práctico y casi es como poner en un disco duro la película y descargarla para su exhibición, por lo que difícilmente se puede encontrar una explicación del por qué no se exhibió el filme “Correr para vivir”, en detrimento claro de sus productores y de la gente que se quedó sin verla. Ojalá que esto no vuelva a pasar.