Del Puño y Letra de Enrique Lucero
-Dio “vida” a la muerte más famosa del cine nacional en “Macario”
-A pesar de trabajar en Hollywood nunca protagonizó una película
Sin imaginárselo, Enrique Lucero se convirtió en la muerte más famosa del cine mexicano, al interpretar al siniestro personaje en la película “Macario”, el primer filme mexicano en ser nominado al premio Oscar, en la categoría de Mejor Película en Lengua Extranjera, en 1960.
El filme no ganó el preciado galardón pero se convirtió en un clásico del cine mexicano y está considerado en la lista de las 100 películas más importantes de la cinematografía nacional y es, hasta la fecha, una de las historias con mayor difusión en la pantalla chica y por internet, especialmente en estas fechas en que en nuestro país se recuerda a los fieles difuntos o Día de Muertos.
Participar en “Macario”, dio un fuerte impulso a la carrera de Enrique Lucero quien frecuentemente era contratado para trabajar en Hollywood, al lado de figuras de la talla de Yul Brynner, Steve McQueen, Charles Bronson, Burt Reynolds, Shirley MacLaine, Robert Redford, Ryan O’Neal, Clint Eastwood y Arnold Schwarzenegger, entre otros.
En México, sin embargo, nunca fue profeta en su tierra pues a pesar de la popularidad que le dio su papel de la muerte en “Macario” y de su constante incursión en Hollywood, los productores de películas mexicanas nunca le dieron la oportunidad de protagonizar una historia.
Lo anterior no impidió que Lucero tuviera una activa participación en el cine mexicano, en el que trabajó en más de 100 películas, entre ellas: “La Rosa Blanca” (1961), “Paraíso escondido” (1962), “Tiburoneros” (1963), “Presagio” (1974), “Canoa” (1976) y “Las poquianchis” (1976).
En Hollywood trabajó en “Justicia salvaje” (1984) al lado de Charles Bronson, con Burt Reynolds y Silvia Pinal en “Arma de dos filos” (1969), mientras que con Ryan O’Neal y Omar Sharif participó en “Hielo verde” (1981). En “Dos mulas para la hermana Sara” (1970) su roce laboral fue con Shirley MacLaine y Clint Eastwood.
Enrique Lucero, hombre sencillo y actor de gran capacidad histriónica para interpretar cualquier tipo de personaje, siempre vivió agradecido con el director Roberto Gavaldón por haberlo elegido para “dar vida” a la muerte en “Macario”. La historia contó además con el encanto del blanco y negro fotografiado por el laureado cinematógrafo, Gabriel Figueroa, además de la actuación del primer actor, Ignacio López Tarso.
“Macario” no sólo fue la primera película mexicana nominada al premio Oscar en la categoría de Mejor Película en Lengua Extranjera, sino que, además, ganó para México La Palma de Oro, en el Festival Internacional de Cine de Cannes, Francia, en la categoría de mejor fotografía gracias a la labor artística con la lente realizada por Gabriel Figueroa.
En estas fechas que en México recordamos con ofrendas a nuestros seres queridos que ya no están en este mundo, presentamos el testimonio que Enrique Lucero escribió a PECIME: