Del Puño y Letra de René Cardona

Fue figura de la época de oro y descubrió para el cine a Blanca Estela Pavón y a Susana Guízar

René Cardona no sólo descubrió para el cine mexicano a dos de su más grandes figuras, Blanca Estela Pavón y Susana Guízar, sino que con su labor como actor en las cintas “Marihuana” (1936), “El baúl macabro” (1936) y “Allá en el rancho grande” (1936), contribuyó al inicio en México de una de las etapas más brillantes de la cinematografía nacional: La época de oro.

René quería ser médico en su natal Cuba pero la crisis económica en la isla lo hizo emigrar con su familia a Nueva York, en donde por falta de recursos económicos finalmente decidió abandonar los estudios de medicina. Fue entonces que conoció al mundialmente famoso galán de la época, el astro hollywoodense Rodolfo Valentino, quien lo ayudó a conseguir empleo como “extra” en varias películas.

Su primer encuentro con el cine lo dejó tan fascinado que decidió iniciar una carrera en la industria fílmica empezando desde abajo, es decir desempeñando los más modestos puestos de trabajo hasta alcanzar el nivel de director de una película. Fue así como en 1929 se aventuró a producir, escribir, dirigir y protagonizar “Sombras habaneras”, la primera cinta hablada en español hecha en Hollywood.

Con la experiencia adquirida en la meca del cine mundial, René se trasladó en 1932 a México en donde continuó su carrera como actor y, después de conocer y casarse con Julieta, hermana del célebre productor y director Miguel Zacarías, inició en nuestro país una brillante trayectoria como escritor, guionista, productor y como director.

En su faceta de actor, participó en las tres cintas que están consideradas como el inicio de la época de oro del cine mexicano, “Marihuana” (1936), “El baúl macabro” (1936) y “Allá en el rancho grande” (1936), en las que los artistas con quienes compartió créditos, Esther Fernández y Tito Guízar, se llegaron a convertir en dos importantes figuras de la cinematografía nacional.

En 1937 hizo su debut en México como director con la cinta “Don Juan Tenorio”, que él mismo protagonizó y con la cual no tuvo mucho éxito. Pero fueron las películas “Allá en el rancho chico” y «La Reina del río” las que lo hicieron trascender al hacer debutar a dos actrices que a la postre se convertirían en grandes figuras del cine mexicano: Blanca Estela Pavón, en la primera, y Susana Guízar, en la segunda.

Otro de sus grandes méritos fue dar su primera oportunidad estelar a Pedro Infante en “Jesusita en Chihuahua” y hacer debutar en cine a Germán Valdez Tin Tan en la cinta “Hotel de verano”. Ambos artistas, en agradecimiento al cineasta aceptaron aparecer juntos por única vez en la cinta “También de dolor se canta”.

El cine de René Cardona también enfocó  en el público infantil para el que produjo y dirigió las cintas “Pulgarcito” y “Santa Claus”, y en las décadas de los años 60 y 70 se involucró en el cine fantástico dirigiendo películas de luchadores, entre ellos “El Santo” y “Blue Demon”.

Sus filmes “La isla de los hombres solos”, “El pequeño Robin Hood” y “Supervivientes de los Andes” alcanzaron el éxito internacional. A unos días de haberse conmemorado un aniversario más de su nacimiento (8 de octubre de 1905), hoy les compartimos el texto que de su Puño y Letra escribió a PECIME y a sus socios: