Un éxito resultó la XLVII Entrega de las Diosas de Plata llevada a cabo en el majestuoso teatro Metropólitan, donde la familia cinematográfica se dio cita una vez más, para celebrar al cine mexicano y ser testigos de la más emotiva ceremonia que se realiza para premiar a lo mejor de la industria del celuloide.
Como cada año, los esfuerzos de los socios de Periodistas Cinematográficos de México A.C. se vieron coronados con una amplia concurrencia que abarrotó el foro de la calle de Independencia, en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Las mujeres lucieron vestidos largos y hermosos peinados, mientras que los caballeros vistieron el tradicional y elegante traje oscuro.
Decenas de representantes de medios de comunicación, nacionales y extranjeros, se dieron cita en la amplia alfombra roja que ocupó la acera del famoso teatro y así captar sus gráficas e imágenes que dieron la vuelta al mundo. Los reporteros no pararon de entrevistar a las estrellas de la actuación, que platicaron sobre la importancia que para el cine mexicano tienen las Diosas de Plata. Cabe mencionar que entre las más solicitadas fue nuestra homenajeada, Christiane Martel, quien dio muestras de sencillez que enamora a quien tiene el privilegio de platicar con ella.
Una vez más el escenario estuvo a su máximo esplendor, decorado con flores y bañado de luces multicolores, con nuestras dos magnas esculturas a cada costado del mismo y pantallas de Alta Definición, donde se proyectaron los clips de las nominaciones así como el material de video de los homenajes.
Se ha hecho tradición que las ceremonias de la Diosa de Plata cuenten con un anfitrión que a su vez tiene a su cargo el aspecto humorístico. En esta ocasión, la ceremonia se vistió de gala para recibir a uno de los mejores comediantes de nuestro país, Teo González, quien hizo reír a la concurrencia con su comedia fina, sin el uso de palabras altisonantes.
Teo distinguió a PECIME al venir de Guadalajara, Jalisco, en donde radica desde hace varios años, exclusivamente a participar en la 47 edición de Diosas de Plata, algo que los socios de la agrupación valoran y agradecen del gran comediante, quien además de su simpatía y talento, es un hombre sencillo, cualidades que lo han encumbrado en la fama y en las preferencias del público.
En el plano musical, la Orquesta de Pérez Prado del maestro Israel Garnica le puso el toque festivo. Su presencia se debió a que el famoso “cara de foca” nació hace cien años, motivo suficiente para que la famosa agrupación, integrada por quince elementos y dos bellas bailarinas, ofrecieran un repertorio que hizo recordar a los adultos su época de juventud, mientras que para sorpresa de todos, la juventud que asistió al evento, quedó maravillada por la exquisitez instrumental de las creaciones que nacieron del talento e inspiración del maestro Dámaso Pérez Prado.
Y no podían faltar los protagonistas de la noche, todos los nominados en las diferentes categorías. Hubo emociones y sentimientos encontrados, entre los ganadores y aquellos que no lograron el sueño de llevarse su Diosa de Plata, pero al final, todos coincidieron que lo importante es sumarse a la gran fiesta del cine mexicano, cuya edición XLVII resultó ser como las anteriores, un nuevo éxito para Periodistas Cinematográficos de México.
Ver más en: https://pecime.com.mx/xlvii-entrega-de-las-diosas-de-plata/galeria/
Foto: Cortesía de IMCINE