El gran detalle de Ludovic Bonleux: Cederle la Diosa de Plata que ganó a madres buscadoras

Uno de los momentos más emotivos de la noche de la gala de las Diosas de Plata fue cuando se anunció a Ludovic Bonleux como ganador de la categoría a Mejor documental por su trabajo en “Toshkua”, cuyo significado en lengua original de Honduras es “Desaparecer”.

Y es que una vez ya en el escenario el cineasta le obsequió la estatuilla a Mary, la madre buscadora hondureña sobre la cual giró el tema de su trabajo fílmico, quien lo acompañó a recibir el premio portando una gran manta con la fotografía de su hijo Marco Antonio desaparecido desde el 2013.

Ante el público presente Ludovic reconoció la fortaleza de todas las madres centroamericanas que año con año realizan un recorrido desde esa zona de América Latina hasta la frontera de México y Estados Unidos para saber el paradero de sus hijos que se perdieron en su travesía por nuestro país en su búsqueda del sueño americano.

“Voy a dar esta Diosa a Mary que está con nosotros. Ella aparece en el documental y está aquí para presentar la película, pero también para buscar a su hijo quien desapareció hace 11 años en Tamaulipas. La Diosa de Plata es para ella y para todas las personas que están buscando a sus familiares”, comentó Ludovic.

El gran detalle arrancó el aplauso del público y una buena parte aplaudió de pie este gesto del realizador quien tardó más de siete años en producir este impactante documental que narra la crudeza que envuelve el secuestro de cientos de centroamericanos durante su traslado por México para llegar a la frontera con Estados Unidos.

“Es un honor para mí y para todas esas madres que estamos a la búsqueda de nuestros hijos recibir el premio. Esta película visibiliza la travesía de todos ellos por este país para llegar a Estados Unidos donde buscarían un futuro mejor para sus familias”, comentó emocionada y a la vez nerviosa la señora Mary.

Agradeció también a todo el crew que trabajó en el documental porque fueron acompañándola a lo largo del tiempo que duró la caravana de madres centroamericanas buscadoras, mostrando la tenacidad de todas para hallar con vida a sus familiares.

“También quiero agradecer a todos aquellos que hicieron posible que esta película esté en este lugar”, expresó en su momento Ludovic Bonleux refiriéndose a la nominación y posterior entrega de la estatuilla a Mejor Documental que Pecime le otorgó por “Toshkua”, pues gracias a esto, habrá más lugares donde podrá exhibirse y visibilizar la triste tarea de cientos de mujeres centroamericanas por encontrar a sus familiares desaparecidos.