Drama y humor negro en “Por favor no me abandones”, película del cineasta Antonio Rotunno

Valentina Sumavski protagoniza «Por favor no me abandones», producción independiente del cineasta tamaulipeco Antonio Rotunno que llegará a salas de 15 estados del país, a partir del próximo 21 de septiembre. Horror, drama y humor negro nutren este thriller que fue estrenado en festivales internacionales de cine durante 2022, obteniendo 5 premios en dicho recorrido.

Basada en un guion también de la autoría de Rotunno, “Por favor no me abandones” fue rodada en 2020 en ciudad Victoria, Tamapulipas. La trama sigue a ‘Helena’, una joven ex adicta que esconde una serie de conflictos psicológico-emocionales, con  los que enfrenta un tema del pasado de ‘Jesús’, su novio actual, con quien ha logrado mantenerse en paz en los últimos años.

‘Anna’, la expareja de ‘Jesús’, se asoma al presente, desatando una serie de miedos en ‘Helena’, que estallan en violencia doméstica. “Un instante irracional puede destruir la cotidianidad enrareciendo la relación con un tono trágico y macabro”, describe la sinopsis de “Por favor no me abandones”.

La nueva película de Rotunno, integrante fundador del grupo de rock industrial / experimental “La Función de Repulsa” desde 1986 y del colectivo Genital Productions desde 1991, irrumpe en el cine nacional con una propuesta personal y una visión distinta a lo acostumbrado en la mayoría de las obras mexicanas de su género, situándola entre lo que en el extranjero se conoce como “midnight movies” (películas de medianoche), ligadas al cine de culto.

Aparentemente sencilla, la película se sostiene en gran parte por la destacada participación de su elenco encabezado por Valentina Sumavski (“Como dice el dicho”, “La Malquerida”, “Amores con trampa”, “La Querida del Centauro”, “Rosario Tijeras”) y Jesús Meza, el coprotagonista (“La región salvaje”, “Érase una vez”, “Tekuani”, “La novia de América”, “La réplica”, “Satanic Hispanics”, “El Candidato”, “UGly”.

El reparto es redondeado con las actuaciones de Sara Manni (“Días de gracia”, “Soy tu fan”, “Más negro que la noche”, “Esto no es Berlín”, “Bronco: un éxito indomable”, “La Doña”, “El Rey: Vicente Fernández”); Rafael Gallegos Parra (“El Chema”, “La Doña”, “Pedro Infante”, “El Conde”) y los actores tamaulipecos Carlos Rodríguez y Alejandro Santisbón, ambos con trayectoria en teatro, cortometrajes y películas.

Sobre su nueva película, Rotunno nos comentó que no le resultó sencillo escalar el tema de la violencia doméstica hacia un thriller con un gusto a gore: “Hace tiempo quería abordar una serie de temas que varios directores han explorado, como los hermanos Coen o Hitchcock…

“Cuando una persona promedio recurre a la violencia y ocurre una tragedia, ¿qué haces con ella? Traía esa premisa, pero no había encontrado cómo abordarla. Al principio la relacioné con el crimen organizado, pero no quería caer en ese tópico”.

Confió que fueron situaciones absurdas y violentas de la vida real, las que lo inspiraron para escribir el argumento de su película: “Leí una noticia de dos personas que pelearon en un estacionamiento y uno clavó un desarmador en el ojo al otro u otra que sucedió en una fiesta, donde alguien estuvo a punto de arrojar un bloque de cemento a otro tendido en el suelo…

“Estos casos me hicieron reflexionar para entender hasta qué punto llega la irracionalidad humana: un momento de desborde emocional puede surgir de la cotidianidad. Estos incidentes me sirvieron para desarrollar una historia más conectada con lo cotidiano. Empecé a trabajar el personaje de ‘Elena’ como alguien con una situación límite, contenida hasta que discute con su pareja”.

Admirador del cine exploitation y grindhouse y de  directores como John Waters o  Takashi Miike, Rotunno confió que algunos amigos le hicieron notar que podría estar haciendo referencia a Dario Argento, cuyo estilo lo impactó desde joven.

“Aprecio del giallo esa combinación de thrillers elegantes, en los que al mismo tiempo la violencia es explícita y gráfica. Fui jugando con estas influencias. Por ejemplo, empleé planos detallados para resaltar heridas o lesiones, aspecto que proviene del exploitation y que exhibe la virulencia de la violencia”.

Estas referencias -afirmó- “están presentes en mi trabajo, incluso cuando no soy consciente de ello. A veces ni yo lo percibo, pero cuando alguien me lo señala suele tratarse de un director que admiro. En tales casos, reconozco esa influencia, aunque no haya sido intencional”.

Rotunno cuenta con participaciones diversas en trabajos de otros realizadores, ya sea como actor secundario o extra, asistente de dirección, creador de música original para cortometrajes, sonido directo, etc. Además de la pasión por el cine en general, su interés particular tiende al cine de género, la serie B, el horror, suspenso, indie, etc.

Con antecedentes como escritor y director en 14 cortometrajes así como en dos largometrajes, el primero de ellos de corte dramático, el cineasta explicó que debido a la precariedad de la región en que ha desarrollado su trabajo, así como una esencia ‘hazlo tu mismo’, sus producciones se caracterizan por tener “un estilo guerrilla”.

“Guerrilla por el bajo presupuesto y la idea de un cine al margen de las tendencias tanto comerciales como de alguna línea cultural trazada desde el centro del país: “Esa ha sido  una característica presente en mis trabajos que buscan narrar historias que realmente lleguen al espectador”.

En cuanto a “Por favor no me abandones”, refirió que gran parte de la historia se desarrolla en el interior de un espacio, una casa de clase media baja, lo que para él fue un reto. “Tardé un año y medio, porque originalmente planeé la película con muchas locaciones. Así que mi desafío fue  superar esta limitación logrando una diversidad en este microuniverso, centrado en un solo espacio y lo logramos”.

“Esto también estaba relacionado con la psicología del personaje, su sensación de estar atrapada. Como si su casa fuera un refugio, pero al mismo tiempo un lugar del que no hay escapatoria”, finalizó el director, para quien hacer cine independiente desde Ciudad Victoria, responde a su necesidad de mostrarse más genuino, alejado de las normas que rigen en ciudades grandes como Ciudad de México o Guadalajara.