Por primera vez Jalisco estuvo presente en las Diosas de Plata, con tres estupendas películas

Por primera vez, el cine independiente del estado de Jalisco fue considerado para los premios Diosas de Plata con tres estupendas películas: «El Poderoso Victoria» de Raúl Ramón, «No vayas a clase mañana», cinta del joven debutante Diego Barragán, que de una manera cruda pero real, aborda el bullying escolar y «Nunca seremos parte de la directora Amalia Eloísa.

Además de «No vayas a clase mañana», distinguida con la Diosa de Plata a Mejor Opera Prima, la cineasta tapatía Amalia Eloísa estuvo nominada en la misma categoría, por Nunca seremos parte”, un drama de la vida cotidiana que impacta por su impecable realización.

De la tierra del tequila y de la birria, llegó a la premiación “El Poderoso Victoria”, de otro entusiasta y talentoso cineasta jaliscience, Raúl Ramón, quien con esta historia que se hizo merecedora a la Diosa de Plata a Mejor Fotografía, presenta una propuesta fresca y ambiciosa en la que el mensaje principal es la superación.

Cabe señalar que estas tres producciones representan un gran esfuerzo de sus realizadores, ya que para llevarlas a cabo tuvieron que sortear una serie de dificultades, principalmente de tipo económico.

Raúl Ramón se enfrentó a la incomprensión de las autoridades de cine que no creyeron en su historia y por eso le negaron el apoyo. Es de destacar el enorme esfuerzo que el cineasta hizo para ahorrar dinero pues no sólo escribió la historia, sino que también la produjo, la dirigió y realizó la labor de cinefotógrafo. “No tuve de otra que hacerla de mil usos”, comentó el talentoso realizador.

Jalisco estuvo dignamente representado este año por estos tres magníficos trabajos cinematográficos, que después de su participación en este certamen de PECIME, es de desear que sus realizadores y en general todo el talento que hay en esa entidad, logren el apoyo del gobernador Enrique Alfaro y de los funcionarios encargados del área de cine, estatal y federal.

La participación del cine independiente de Jalisco en la ceremonia de Diosas de Plata, fue un elemento más para que la 48 edición se convirtiera en una fiesta donde el principal ingrediente fue el cine mexicano que vive un momento importante tras la pandemia del Covid 19.