Estrella infantil del cine mexicano, ‘Cui’ Rodríguez comparte recuerdos y anécdotas de «los años maravillosos»

Ganador de la Diosa de Plata de Pecime como Mejor Actor Infantil de 1970), por su interpretación del personaje de «Cui» en la película «Faltas a la moral», protagonizada por Alberto Vázquez y Ana Martin, Cuitlahuac Rodríguez, atesora gratos recuerdos de su paso por el cine mexicano que lo consolidó como una de sus estrellas infantiles más queridas.

Hijo del gran director Ismael Rodríguez, realizador de las películas más emblemáticas de Pedro Infante, como «Nosotros los pobres», «Ustedes los ricos» y «Pepe el Toro», Cuitlahuac también es recordado por su actuación en «Mi Niño Tizoc», al lado de Alberto Vázquez (‘el viudo Carmelo’) Macaria (‘Soledad Flores’), Columba Domínguez, Noé Murayama, Sonia Amelio, Aurora Clavel y Julio Aldama, entre otros actores.

En «Mi niño Tizoc», uno de los pocos clásicos navideños hechos en México que  ahonda en el costumbrismo mexicano, «Carmelo’, interpretado por Alberto Vázquez, vende flores baratas en Xochimilco, en el sur de Ciudad de México, por lo que no tiene el cariño de los vecinos. Además cuida solo de su hijo ‘Tizoc’, ya que es viudo, y debido a su mala fama nadie quiere invitar al niño a las tradicionales posadas navideñas, por lo que el padre le prepara un pollo que lo intoxica y ‘Tizoc’ termina en el hospital.

«Faltas a la moral» (1979), «El ogro» (1971) y «Mi Niño Tizoc» (1972), son  algunos de los títulos con los que en la década de los años 70, ‘Cui’ logró consolidarse como uno de los talentos infantiles más queridos de México, por su carisma, simpatía y talento, y no solo por el público, sino también por grandes personalidades de la época de oro del cine mexicano, como  Sara García, Libertad Lamarque, Antonio Aguilar, Ignacio López Tarso, Joaquín Cordero, Gaspar Henaine ‘Capulina’, Julio Alemán, Silvia Pinal, Dolores del Río y María Félix.

«Fueron años maravillosos en los que tuve el privilegio de descubrir y afianzar mi vocación como actor, hasta que por decisión de mis padres, me vi obligado a hacer una pausa para poder atender mejor mis estudios. Tiempo después, ya siendo un adolescente quise retomar la carrera y lo hice, pero ya no fue igual porque había mucha competencia», recuerda con evidente nostalgia el hoy empresario de 61 años.

Fue en el año 1995, cuando «Cui», quien es primo de los hermanos Romay, Titina y Pepito, protagonista éste de «Angelitos Negros», película protagonizada por Pedro Infante y Emilia Guiú, decidió retirarse definitivamente del cine, casi al mismo tiempo en que su padre dejó de trabajar en la industria.

 «La trampa de una chica», «Defectos morales», «Usualmente», «Corrupción», «Masacre en el río Tula», «¡Pasto sangriento!», «Dos mujeres de cuidado» y «Trajeron violencia», conforman junto con «Faltas a la moral», «Mi niño Tizoc» y «El ogro», parte de la amplia filmografía de Cuitláhuac (33 películas), cuya incursión en el cine mexicano se dio por accidente.

«Hice ‘Faltas a la moral’ por accidente, ya que el actor elegido para hacer mi personaje, declinó para hacer otra cinta en España, y como yo había participado en los ensayos  me lo sabía todo; el único inconveniente es que era tartamudo, pero extrañamente pude decir los diálogos sin problema y se me dio la oportunidad…

«Cuando se estrenó la película tuvo mucho éxito y Pecime reconoció mi trabajo con la Diosa de Plata al Mejor Actor Infantil de 1970 y fue nada menos que una estrella norteamericana quien se encargó de entregármela: el actor Cameron Mitchel, conocido en México por la serie de televisión «El gran Chaparral» y del filme «Autopsia de un Fantasma'», mencionó con mucho orgullo.

En redes sociales, Cuitláhuac Rodríguez tiene publicadas una serie de fotos que dan cuenta de su exitoso paso por el cine y la fama que alcanzó como niño actor, siempre dirigido por su padre, así como de su relación con grandes personalidades de la época, entre ellos Mario Moreno ‘Cantinflas’, que junto con su esposa Valentina Ivanova, fueron sus padrinos de bautismo.

«Alguna vez coincidimos mi papá y yo en Las Vegas con mi padrino. Estábamos en un festival de exhibidores de películas habladas en español. Fue ahí donde don Mario Moreno me comentó que hacía mucho tiempo no me regalaba nada y como se acercaba mi onomástico nos entregó dos boletos para asistir al festejo del cumpleaños número 60 de Frank Sinatra en el Hotel Cesar Palace…

«En ese lugar vi a Frank Sinatra y a estrellas de Hollywood como Dean Martin, Sammy Davis Jr., Diana Ross, Brooke Shields, Farrah Fawcett, Steave Austin, etc, etc., todos ellos querían mucho a mi padrino, pero como yo estaba muy chico la mitad de la fiesta me la pasé dormido en la mesa. Lo único que lamento es no haber llevado una cámara, pero bueno, esos momentos los llevo en mi corazón», narró.

Otra de sus anécdotas que han sido celebradas por sus miles de seguidores, tiene que ver con la película «El ogro» filmada entre Tikal y la Selva de Guatemala, donde alternó con Germán Valdéz ‘Tin-Tan’, sus hermanos Tizoc, Tonatiuh y Xanath Rodríguez; Dolores Camarillo ‘Fraustita’, Carolina Barret, Herbert Meneses y Omar Jasso.

«Cuando filmamos la película hubo inundaciones y muchos ahogados (nos tocó ver a algunos de ellos durante el rodaje). El presidente de Guatemala nos había prestado su avión para movilizarnos dentro de Guatemala, pero no se pudo porque lo usaron precisamente para el rescate, y entonces la fuerza aérea guatemalteca nos facilitó otro avión…

«Al momento de despegar desde Tikal, el avión de hélices de 4 motores, donde viajábamos todos, golpeó contra un árbol y ya durante el vuelo se quemaron 3 de los 4 motores, por lo que tuvimos que aterrizar de emergencia en un aeropuerto donde por causa de un apagón, tenían instaladas lámparas de petróleo para iluminar la pequeña pista de tierra. Pensábamos que íbamos a morir, pero afortunadamente el piloto hizo un gran trabajo».

Cuitláhuac Rodríguez relató a Pecime que como director, su papá (Ismael Rodríguez) era muy estricto en el set: «A él le gustaba que los actores llegaran con sus parlamentos bien memorizados y si bien siempre organizaba ensayos previos, no lo hacía de forma exagerada, para evitar que las actrices y los actores se sobre-entrenaran y eso les hiciera perder emotividad al momento de la filmación».

En la  madurez de su vida, y aún cuando actualmente está dedicado de tiempo completo a producción musical y promoción de nuevos talentos, como el cantante Paolo, ‘el Millenial de la cumbia’,  «Cui» no descarta volver al cine como intérprete o como escritor de guiones propios que -adelantó- tiene listos para ser producidos.

Cuitláhuac Rodríguez se enorgullece de haber pasado a la historia del cine mexicano como parte de una generación inolvidable de estrellas infantiles que vio nacer el público en la década los años 70, entre ellas Titina Romay, quien interpretó a Belén en «Angelitos Negros» o María Eugenia Llamas, mejor conocida como «La Tucita», quienes trabajaron junto al ‘Ídolo de México’, Pedro Infante.