«Por Mi Hija», el drama de Fernando Rodríguez que retrata la vida de las parejas que emigran en busca del «sueño americano»

Mostrar la realidad de vida a la que se enfrentan los migrantes tras cruzar la frontera norte para ir en busca del “sueño americano” que no siempre se logra alcanzar, impulsó al director México-estadounidense Fernando Rodríguez a llevar al cine Por mi Hija, su ópera prima en largometrajes.

Estrenada el pasado mes de octubre, en el marco de la novena edición de la Gran Fiesta del Cine Mexicano, en Guadalajara, Jalisco, la película ya se exhibe en el mercado de los Estados Unidos desde el pasado 1 de febrero a través de la plataforma TubiTV y el servicio de streaming Amazon Prime.

Programada para estrenarse próximamente también por Amazon en México y latinoamérica, Por Mi Hija es una historia que cuenta con las actuaciones estelares de Christopher Bustos (Today You, Tomorrow Me (2020), Spiked (2021); la niña Luciana Elisa Quiñónez (Starfish (2020), La Jaca) y Daniela Vidaurre (Rescatado, 2019; So be it, The Honey Trapper, 2019; The Penitent Thief, 2020), actores estadounidenses con raíces mexicanas.

La trama de esta cinta rodada hace un año de manera independiente, en locaciones de Jalostitlán Jalisco y San Diego, California, sigue a Emma y a Leo, una joven pareja de México que tras su decisión de emigrar se enfrenta a la pesadilla de tener que vivir en condición de ilegales en un país extranjero, lejos de su cultura, sin familia y sin amigos…

El director México-estadounidense Fernando Rodríguez

Emma es joven y está embarazada. Es una recién casada y seguirá a su esposo Leo a cualquier parte. Leo quiere darle a su hija una vida mejor en Estados Unidos, pero una vez asentados del otro lado de la frontera norte de México, su vida transcurre dentro de una realidad distinta a la que soñaban… Leo se pregunta qué tipo de vida le está dando a su hija, la pequeña Luciana, sin familia y en la condición ilegalidad en la que viven en un país extranjero…

La pareja se verá obligada a enfrentar las decisiones que han tomado al dejar atrás sus tierras, su religión, su cultura, su comida y a su gente. “Y como en el caso de Leo y Emma, muchos habitantes de los pequeños pueblos de México han hecho este mismo viaje, es como un derecho de paso para muchos aquí…

“Son gente del campo muy trabajadora que va a la iglesia, viven de la tierra, pero algunos aceptan el desafío de emigrar para mejorar la vida de sus familias, aunque después entienden que el ‘sueño americano’ no es para todos, y bien puede ser un espejismo, a veces funciona y a veces no”, comentó Fernando Rodríguez a Pecime.

En entrevista, el cineasta afirmó que además de ‘darle un poco de luz’ a las historias de los migrantes en un país que no es el suyo, donde sus días transcurren en medio de las luchas que enfrentan viviendo ilegalmente «y tratando de criar una familia dentro de una cultura que no los respeta», su intención al hacer la película es que se sepa que en México «no todo es pobreza, violencia ni narcotráfico», como lo difunden los medios ante el mundo.

“Hay una tendencia de mostrar a los inmigrantes que se mudan a los Estados Unidos, con la justificación de que salen de sus países de origen porque estos son un infierno, lo cual no es cierto y ese es uno de los mensajes de la película.

«Aquí se muestra el drama a que se enfrentan, pero también y en contraste, la belleza de los lugares de los que provienen y la rica cultura de México que muchas veces nuestros paisanos no valoran al emigrar y eso es importante que se conozca en el mundo entero”, dijo Rodríguez, también autor del guión, productor, director de fotografía y editor de la cinta, cuya filmación le representó un desafío, ya que pudo concretarla hace un año, en plena pandemia por el Covid-19.