Del puño y letra de Fernando Fernández

Fernando Fernández marcó toda una época en el cine y en la radio de nuestro país. Fue conocido como “El crooner de México”, por la voz aterciopelada que lo caracterizó para interpretar canciones románticas que fueron éxitos discográficos como “Un corazón”, “Arrabalera”, “Callejera”, “Hipócrita” y “Traicionera”, temas que dieron título a varias de las historias que protagonizó para la pantalla grande al lado de las actrices Marga López y Meche Barba. Pero no sólo se limitó a trabajar en películas con temas de cabaret o el arrabal, sino que incursionó en cintas dramáticas con alto contenido social como “Enamorada” y “Río Escondido”, en las que alternó con la diva María Félix y el galán de la época Pedro Armendáriz, así como con el más grande villano del cine mexicano: Carlos López Moctezuma. Su versatilidad histriónica lo llevó a trabajar también en las simpáticas comedias “La muerte enamorada”, con la bella Miroslava, y “Doña Mariquita de mi corazón”, en la que alternó con Silvia Pinal y Joaquín Pardavé. A diferencia de sus hermanos, el actor y líder sindical, Jaime Fernández, y el prestigiado director, Emilio “Indio” Fernández, Fernando combinó su actividad artística entre los escenarios cinematográficos, los estudios de grabación y la radio. De hecho su boda con la cantante de moda de aquellos años, Lupita Palomera, fue el primer evento de tipo social que se difundió en México por este medio electrónico. Este singular actor tuvo en los socios de PECIME a sus mejores aliados, ya que siempre apoyaron su carrera, a lo que él correspondió con un agradecimiento cuyo texto compartimos con ustedes:

 

 

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